Hierba de sapo: la planta medicinal que no puede faltar en casa
Hoy vamos a conocer la hierba de sapo. La medicina natural es parte importante de la vida de muchas personas e incluso culturas. Tanto por el costo de los fármacos como los efectos secundarios que, en mayor o menor medida, todos ellos tienen.
Para esas personas que cuidan su salud con lo que la tierra nos regala en un sinfín de plantas, es importante estar al día a la materia. Por eso, hoy les traemos esta planta que, aunque no es de reciente descubrimiento, sí que los estudios y el conocimiento adquirido por la práctica son de gran ayuda.
¿Qué es la hierba de sapo?
De la familia de las Apiaceae, esta planta es conocida por diversas propiedades curativas que se le atribuyen y que se han comprobado por experiencia y estudio. Usándose para casi todo y, como buena publicidad, transmitiendo de una generación a otra estos conocimientos.
Su nombre científico es Eryngium carlinae y la Eryngium heterophyllum, según la especie de la que se trate, sin embargo, ambas son conocidas por los nombres de hierba de sapo, raíz de sapo, cabezona, espinosa, escorzonera y cardón.
Esta planta es oriunda de México y de otros países de Centroamérica, en los cuales se da debido a las temperaturas templadas y el clima relativamente poco cambiante. Se caracteriza por ser espinosa, perenne (es decir, se puede encontrar durante todo el año) y de flores moradas, azules o blancas.
Usos de la hierba de sapo
Cada parte de esta planta se utiliza para aliviar distintos males, por lo tanto, cuando se toma la decisión de usar hierba de sapo se escoge aquella parte de la planta que más conviene para la necesidad del momento; es decir, según lo que duela se preferirá la raíz, las flores o las hojas.
Se pueden mencionar enfermedades y malestares, que ha sido comprobado el efecto positivo de esta planta sobre ellas, tales como:
- Tos, pertusis (tos erina), asma.
- Infecciones urinarias.
- Niveles altos de colesterol y triglicéridos en sangre.
- Para disminuir el peso y el porcentaje de grasa corporal de forma natural.
- Cálculos renales y vesiculares, además de reducir los niveles de creatinina y ácido úrico (que son altamente perjudiciales para los riñones)
- Tiene propiedades tripanocidas, lo cual la hace ideal como tratamiento para las enfermedades causadas por tripanosomas.
- Funciona como diurético, para inducir las contracciones del útero y como afrodisíaco.
- Si se combina con otras plantas medicinales se convierte en un tratamiento para la gonorrea.
- Se puede utilizar también para el cáncer, angina de pecho y prevenir la arterioesclerosis.
- Es buena para tratar el envenenamiento por mordedura de serpiente y sirve, también, para repelerlas.
- Otros usos son para quemaduras, fiebre, problemas gastrointestinales, diarrea y malaria.
- Tiene acción inhibidora sobre la monoamino oxidasa (MAO), lo cual convierte a la hierba de sapo en una potente fuente de metabolitos secundarios. Estos se utilizan para combatir enfermedades del sistema nervioso central como consecuencia de tratamientos para procesos neurodegenerativos.
¿Cómo tomar hierba de sapo?
Los tallos y las hojas se pueden hervir en agua y preparar con ellas una infusión. También se puede hacer una decocción con la raíz y tomarla como te.
Para preparar te de hierba de sapo solo basta poner en agua hirviendo la parte que se va a utilizar, dejarla unos 5 minutos, apagar la estufa o el fuego y dejar que repose, al menos otros 5 minutos antes de consumirlo.
También se pueden encontrar cápsulas que contienen hierba de sapo. Si se opta por estas, basta tomar 2 cápsulas con cada alimento. No obstante, sea cual sea la forma en que se ingiera, es de suma importancia consultar con el especialista antes. Sobre todas las cosas, evitar la automedicación.
Contraindicaciones y efectos secundarios
- No debe usarse durante el embarazo ni en el tiempo de lactancia.
- No se debe ingerir por más de 8 semanas consecutivas, pues puede ocasionar problemas renales.
- Productos que contengan hierba de sapo en sus ingredientes pueden causar alergias en la piel en personas sensibles. Por eso se debe consultar primero con el especialista.
- En caso que se esté, actualmente, en un tratamiento de medicina no debe interrumpirse para empezar uno nuevo. Debido a que el cuerpo está funcionando con esa planta o hierba, si deja de consumirla de manera abrupta, puede ocasionar daños.